jueves, 3 de septiembre de 2015

El ejercicio de la libertad en la educación personalizada

1. La educación personalizada, convergencia de preocupaciones
La educación personalizada puede considerarse el resultado de la convergencia de tres preocupaciones fundamentales: la eficacia de la enseñanza, la democratización de la sociedad y de las instituciones escolares y la especial atención a la dignidad humana.
Todo el pensamiento de Dewey y gran parte de la producción pedagógica norteamericana, encuentra en la necesidad de salvaguardar los valores democráticos una de las razones para la enseñanza individualizada.
Pero la más profunda razón de la educación personalizada surge de la consideración del hombre como persona, su carácter de sujeto activo frente a un mundo de realidades objetivas, respecto del cual ocupa un plano de superior dignidad y cuya vida es plenamente humana, auténtica, sólo mediante el ejercicio de su libertad.

2. El ejercicio de la libertad. Autogobierno de los escolares
Una exigencia de la libertad personalizada es el ofrecimiento de posibilidades de elección en distintas situaciones con objeto de que los escolares vayan ejercitándose en el uso de la libertad.
Ya la enseñanza individualizada implica posibilidades de elección respecto de materias y técnicas de trabajo. Pero junto a la enseñanza está la vida misma que se desarrolla en las instituciones educativas. Y en orden de esa vida deben existir posibilidades de elección por parte de los escolares. Para que los actos de elegir sean verdaderos actos libres han de realizarse como una consecuencia de la reflexión acerca de las posibilidades que al sujeto se le presentan, de aquí el que en una actuación educativa personalizada la reflexión y la deliberación sean actos imprescindibles. Se trata de que, a través de la enseñanza, el alumno sepa atenerse a las consecuencias de sus elecciones, y tenga capacidad de aceptar la responsabilidad en los actos libres.
Cuando en una institución escolar las posibilidades de elección e iniciativa de los alumnos son suficientemente extensas como para constituir un entramado que influye en la actividad entera de la escuela, entonces se puede hablar en rigor de la existencia de una participación de los alumnos en el gobierno de la institución escolar. Esta participación es uno de los típicos logros de la educación personalizada.